La población espera con ansias que el cambio de autoridades propicie que el 2020 se convierta en un punto y aparte que marque el inicio de tiempos mejores.
POR Rocío Ballestero, Carolina Barrantes, Luis Solís, Alejandra Soto, Loida Martínez y
Jenny Lozano
La economía de Guatemala cerró el 2019 con una tasa de crecimiento de 3,5%, la más alta desde el 2016 y superior a las proyecciones iniciales del Banco de Guatemala (Banguat). Refleja un mejor desempeño en comparación con otros países de la región y las autoridades de dicho banco central proyectan que continuará por ese sendero. El dinamismo en el gasto público, el incremento de las remesas familiares y una mayor actividad de minas y canteras por la extracción de minerales no metálicos, especialmente para la fabricación de cemento, incidieron en la bonanza.
“El principal indicador que evidencia la expansión de la economía es el consumo, que se espera cierre 2019 con un alza de 7,8%, en comparación a 2018. Se unen otros factores relevantes, como el aumento en la de- manda interna y estabilidad en las tasas de interés y de cambio”, indica Roberto Ramírez, gerente de Valuation, Modeling & Economics Transaction Advisory Services de la consultora EY.
Aunque la noticia genera entusiasmo, también se reconoce que la cifra alcanzada es insuficiente para reducir la pobreza, algo que el nuevo gobierno tiene muy claro.
“Basándonos en los recientes datos del censo nacional, la población crece cerca del 1,8% anual y la inflación en 4%. Para alcanzar cambios significativos en el modelo de desarrollo, el PIB debería sostenerse en al menos un 6% anual”, nos asegura Alejandro Giammattei, presidente electo de Guatemala, quien asumirá el mando a partir de este 14 de enero y desde ya manifiesta abiertamente su intención de atraer inversión durante su gestión.
Esfuerzo Compartido
Los empresarios claman por certeza jurídica, ya que a su criterio es uno de los factores más importantes que ha desencadenado la pérdida de competitividad, así como por acciones contra el mal estado de las carreteras, la excesiva tramitología y la violencia. “Se debe aumentar la inversión en infraestructura, tanto en el presupuesto estatal como por medio de asociaciones público-privadas, para lograr una red vial más amplia, mejores puertos y aeropuertos, en aras de facilitar los procesos de exportación e impulsar a la pequeña y mediana empresa”, añade Jordi Prat.
Destrabar el camino
Restablecer la confianza política, que ha sufrido “fuertes golpes de credibilidad”, y elevar la calidad de vida”, destacan entre las tareas prioritarias para el nuevo año. Todo eso sin descuidar otros factores, como el crecimiento económico, el tema fiscal y la desigualdad, así como importantes decisiones de inversión pública.
“El nuevo gobierno debe hacer un esfuerzo fuerte para ganarse la confianza de su gente, fortalecer la gobernanza y generar estabilidad. Debe aprovechar el acervo de activos que tiene el país desde su ubicación geográfica privilegiada hasta poseer una población joven con mucho potencial, la deuda pública más baja de la región y una estabilidad macroeconómica envidiable para enfrentar retos sociales en educación, salud e infraestructura básica”, destaca Jordi Prat, economista regional principal del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Alejandro Giammatte, presidente electo de Guatemala, por su parte, afirma estar dispuesto a poner toda la energía posible para mejorar el clima de negocios, la competitividad y avanzar en la creación de polos de desarrollo en el interior de país, junto con su equipo de ministros y comisionados.
“La única forma de recuperar confianza es cumpliendo con las promesas. El tema de transparencia tiene que ir de la mano con un ataque frontal a la corrupción, a través del Programa Nacional contra la Corrupción y la instalación de un gobierno electrónico que sea abierto a la fiscalización social permanente”, señala el nuevo mandatario. Para el 2020, otra de sus prioridades será impulsar un modelo exportador que “saque a todos de la zona de confort”, que lleve a los aspirantes a empleos a estudiar, a aprender idiomas; a las empresas a innovar, elevar su calidad y competir con el mundo; y al Estado a simplificar procesos, mejorar la salud, la educación, la seguridad y encontrar la forma de dar certeza jurídica para generar la confianza que requiere la actividad económica.
Proyectos que buscan consolidarse en 2020
- Autopista Escuintla-Puerto Quetzal (con cobro de peaje): Se espera retomar la discusión en el Congreso de la República para que el contrato sea aprobado.
- Interconexión Vial y Transporte Ferroviario Urbano de Pasajeros Eje Norte-Sur de la Ciudad de Guatemala (Metro Riel) y Modernización, Eficiencia y Seguridad del Aeropuerto Internacional La Aurora: Ambos esperan la aprobación de impacto financiero y fiscal, así como aprobaciones finales del Consejo Nacional para el Desarrollo de Infraestructura Económica, previo a arrancar la fase de licitación.
- Centro Administrativo del Estado en la Ciudad de Guatemala: Están pendientes las autorizaciones locales y la actualización de estudios.
- Sistema de Transporte Público Masivo del Eje Oriente- Occidente: En 2020 se harán los estudios de prefactibilidad.
- Construcción, ampliación y mejoramiento de libramiento a la Ciudad de Guatemala, a través de la Interconexión CA-09 Norte- CA-01 Oriente (Vía Exprés): Se espera la aprobación de estudios por la institución contratante del Estado.
- Puerto Seco Intermodal Tecún Umán II: Pendiente aprobación de la fase II. La fase I se realizó por obra pública, por la empresa Ferrovías.
Ene 10, 2020 | Economía, Noticias de hoy
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